Soy Javier Rabadán y encontré mi verdadero camino entre fogones, aunque no fue desde el principio. Durante años viví desconectado de mí mismo. Entre los 20 y los 40 años, atravesé un periodo marcado por el consumo excesivo de alcohol. Fue una etapa que me alejó de muchas cosas, pero también me trajo la claridad de saber lo que ya no quería en mi vida.

A los 35 años decidí volver a empezar, esta vez desde mi pasión, que es la cocina y la pastelería. Me formé profesionalmente, pero siempre dejé que la intuición, el sentido común y la emoción guiaran mi forma de cocinar. Porque para mí, la cocina no es sólo técnica, es un ACTO DE VIDA.

Entre 2017 y 2022 tuve el privilegio de dirigir La Real, mi propio restaurante en la sierra de Madrid, en Fresnedillas de la Oliva. Allí se mezclaban sabores tradicionales, una parrilla de carbón de encina, toques asiáticos y técnicas de vanguardia, en una propuesta tan personal como sincera. Fue una etapa de creación, crecimiento y aprendizaje constante, donde conseguimos ganar dos rutas de la tapa y un premio nacional de gastronomía denominado “Plato de Oro”, otorgado por Radio Turismo en 2022.

Hoy, a mis 45 años, comparto mi cocina desde un lugar más profundo: quiero que cada plato cuente una historia, toque emociones y conecte con quien lo prueba.